Como el legendario «hombre del sonido francés» del director Ridley Scott, el ingeniero de sonido Stéphane Bucher se ha consolidado como un socio creativo clave en las películas del cineasta. Para crear las impactantes paisajes sonoros característicos de los éxitos de Scott, Bucher confía en una selección de micrófonos de DPA Microphones.
La colaboración entre Bucher y Scott comenzó de manera inesperada durante la producción de El último duelo, un giro fortuito que marcó su carrera. Pese a los retos iniciales, como viajes de última hora y situaciones difíciles en el set, la habilidad y adaptabilidad de Bucher impresionaron a Scott, lo que llevó a colaboraciones en La casa Gucci, Napoleón y ahora Gladiador II, donde Bucher ha llevado el sonido a una escala épica.



“Fue una mezcla de azar y perseverancia”, comenta Bucher. “Empecé en sets tradicionales de cine francés y luego me adapté a técnicas más complejas anglosajonas, como equipos más grandes y configuraciones multicámara. Esta experiencia moldeó mi enfoque, especialmente en las exigentes producciones de Ridley.”
Para lograr el sonido envolvente de estas películas históricas, Bucher utiliza los micrófonos DPA 6060 Subminiature Lavalier y 4060 Omnidirectional Miniature Lavalier. Desde conversaciones íntimas hasta escenas de batalla, la precisión de DPA permite capturar un audio claro y profundo desde múltiples perspectivas.
“En Napoleón, desarrollé técnicas innovadoras, como equipar a los actores de acción con micrófonos DPA discretos integrados en los trajes,” explica Bucher. “Esto me permitió capturar la intensidad del combate cuerpo a cuerpo sin afectar la estética visual. En Gladiador II, llevé estas técnicas más allá, creando un carrito de sonido especializado, llamado ‘Maximus,’ capaz de grabar audio a más de 300 metros de distancia.”
El desafío más complejo de Bucher fue Gladiador II, trabajando en sets enormes con hasta 12 cámaras y capturando sonido en vastas distancias. Usando tecnología avanzada de fibra óptica y micrófonos DPA estratégicamente colocados, Bucher logró un audio de calidad excepcional, ocultando los micrófonos en armaduras y trajes para crear paisajes sonoros inmersivos desde múltiples ángulos.


“Los micrófonos DPA fueron fundamentales en Gladiador II, ofreciendo la claridad y profundidad necesarias para una película de esta magnitud,” afirma Bucher. “Los productos DPA siempre cumplen, permitiéndome capturar cada detalle, algo crítico cuando trabajas con un director como Ridley Scott.”
Gracias al meticuloso trabajo de Bucher y su continua confianza en DPA, el público puede esperar una experiencia sonora que refleje la intensidad y la grandeza de la visión de Scott.
