Gracias a las capacidades de mezcla inmersiva de KLANG, la gira con The BossHoss se convirtió en una experiencia fluida para el ingeniero de sonido Manuel Knigge. Toda la banda disfrutó de mezclas inmersivas gracias a la tarjeta de expansión DMI-KLANG instalada en su consola DiGiCo SD12.
La claridad de las mezclas de monitoreo mejoró notablemente, y los miembros de la banda se sintieron de inmediato más cómodos, lo que permitió a Knigge un flujo de trabajo eficiente y sin complicaciones. Esto eliminó la necesidad de ajustes exhaustivos en cada recinto durante los eventos de verano al aire libre.
KLANG brinda consistencia a los artistas, permitiéndoles relajarse y dar su mejor actuación. Expande el campo estéreo a una mezcla inmersiva de 360 grados, dando espacio a cada elemento. Esto reduce la fatiga auditiva y mejora la experiencia del artista. Sin esta tecnología, las giras nocturnas habrían requerido un arduo proceso de prueba y error, como recuerda Knigge: “Las giras de verano incluyen una gran variedad de espacios: un día tocamos en un campo, al siguiente en una carpa. Antes de KLANG, trabajábamos mucho para ajustar las mezclas, pero la acústica cambiaba con la audiencia, lo que significaba reajustes constantes en los primeros temas de cada show.”
Knigge, usuario habitual de KLANG, convenció a la banda de implementar la tecnología, incluso sin ensayos previos. Durante el primer soundcheck, con mezclas 3D básicas basadas en grabaciones del año anterior, la respuesta fue inmediata: “Tan pronto como tocaron, sus rostros se iluminaron. Después del primer tema, me dijeron: ‘¡No toques nada!’”
A partir de ahí, todo fue mejorando. Los músicos se adaptaron rápidamente a la panoramización inmersiva, lo que permitió a Knigge perfeccionar las mezclas, manteniendo los niveles consistentes y priorizando elementos clave como las voces. “El primer show fue el mejor porque estaban emocionados con el cambio. ¡Incluso dejaron de hacer soundchecks al final de la gira!”
El diseño ultrarrápido de la DMI-KLANG permite 16 mezclas inmersivas de monitoreo, con 64 canales por mezcla. Knigge usó las mezclas adicionales para el equipo técnico, beneficiando a todos en el tour. “Las mezclas de backline normalmente se hacen a última hora, pero con KLANG, incluso estas mejoraron mucho,” concluye. “La banda lo ama, y mi trabajo es mucho más sencillo. Estoy seguro de que KLANG será nuestra elección para futuras giras.”
La tecnología eliminó las solicitudes constantes de ajustes durante los shows. La mezcla espacial de KLANG posiciona cada elemento con claridad, evitando subir volúmenes innecesariamente, incluso con diez músicos en escena.
